I
Flores solas.
Mudas.
Apiñadas.
Tristes.
Letanía
de silencios
que maceran.
Cementerio
anegado
por el luto de la luna.
Por la vergüenza.
Y el sigilo
es Atila;
absoluto
propietario
de bozales,
que traga
y atropella.
Tengo cadáveres
en los ojos,
y en las venas desconsuelo.
Difuntos que no sabrán
que los besan;
cuerpos que no sienten
el plañido en su faena.
Disimulo,
y el silencio me toma
prisionero.
II
La brisa calla,
no cruje el tiempo,
sisean los pasos
de los dolientes
que ya se han ido,
rezos de tarde,
cajón en hombros,
frío.
Las libélulas
doradas
de las velas,
en el telón
nocturnal
de los sepulcros,
parecen farolitos
timoratos
que encandilan
los desiluminados
parajes de la muerte,
y muestran
al difunto
los caminos
con que se desanda
el mundo
de los vivos
y se vuelve
al valle de dolor
a oler las flores.
III
No bastó la afrenta de la muerte,
el afán de las balas extranjeras...
la tortura.
Nueva emboscada sufre ahora,
en el silencio y la sombra
de esta fosa,
la víctima que escucha los taladros
de la escuadra voraz y carroñera
Hieren la carne de los inquilinos
en su incógnita jornada mordedora,
y entre tajo y tajo y sorbo sustantivo,
vacían el ánfora de su néctar memorioso.
Todo vuelve a su estado primitivo.
Silencio, ruinas, ocio,
elemental polvo.
Risa sin risa.
Carcasa inútil.
Oquedades.
Y el ser querido adquiere por siempre
el epíteto solemne y duro: ¡un muerto!
Mientras, se hincha el sofocamiento
por no ser uno de ellos.
Llueve.
Una nata
de tristezas
va quedando
en las flores
sin color
y sin sustento.
Excelente poema. La espacialización de los versos logran un ritmo a corde con los hechos narrados. Un final de aplauso. Me gustó el verso: "Tengo cadáveres / en los ojos..." una imagen fuerte y que evoca las imágenes dantescas de las fosas comunes.
ResponderEliminarFelicidades.
Por favor. Arregleme la palabra acorde. Va junta.
ResponderEliminarsaludos y felicitaciones otra vez.
cf
http://songadas.blogspot.com/2008/12/campo-diablo.html
ResponderEliminarProfundo. Invita a la reflexión. Coincido con Carlos. Tremendo verso este:
ResponderEliminarTengo cadáveres
en los ojos
y en las venas desconsuelo
y no menos hermoso y triste el que le sigue:
Difuntos que no sabrán
que los besan
maravilloso, Eduardo...me estremece:
ResponderEliminartengo cadáveres
en los ojos
un salto en el corazón ante la fuerza del poema
Erika
Con solo leer el título CAMPO DIABLO te llega a las mismas entrañas de la impotencia, desilución, de la ignominia.Y, te preguntas ¿Valió la pena tantas muertes inocentes?
ResponderEliminarGracias Eduardo, muy bien logrado...
geraldine