jueves, 31 de marzo de 2011

SILENCIO

Esto no pretender ser una sesión espiritual para golpes de pecho, para arrepentimientos o glorificaciones. Esto es solo una acción reflejo después de una intoxicación: voy a vomitar.

Son varios los meses durante los que únicamente me he dedicado a callar. Es bueno eso. Estuve aprendiendo que es en los espacios en blanco donde está la mayoría de la información. Confieso que lo obtenido es poco. Porque callar y hacer silencio no siempre es lo mismo. La boca está cerrada, pero el disco allá dentro gira, y gira y gira.

Me preguntan ¿Cuándo escribirás otra vez? ¿Por qué no posteas algo que nos remueva?

Más Silencio.

Es difícil escribir mientras se dedica uno a existir. No digo "sobrevivir" porque sería hacerme la víctima. Puedo contarles sobre los viajes al fondo-fondo de la ciudad en "diablo rojo", la quincena que va y viene sin hacerme guiños como antes, el miedo al ver cuando se acercan dos adolescentes "extraños" que le hacen pensar a uno en los pocos dólares que flotan dentro de la billetera, la angustia del anónimato después de estar sentado en ring side durante 20 años...

Sí, podría escribir sobre todo aquello. Pero sería como echar sal al océano. Ustedes lo experimentan cada día, y no tiene sentido hablarle a los héroes sobre el miedo.

Existir es completar ciclos, y yo apenas empiezo a cerrar centenares que dejé abiertos por estar distraído. Sepan que estoy bien, descalzo y feliz, mirando y con la boca cerrada, aunque acongojado por algunas secuelas de aquella distracción de la que hablo.

Pero no estoy en silencio. Hay resortes, quizá resentimientos, temores, medias verdades, creencias, culpas viejas, simples pensamientos haciendo lo suyo ahí dentro. Lucho por asesinarlos para que no cumplan su tarea de exterminarme primero. Estoy en guerra contra ese otro yo de la superficie, que pretende tener todas las respuestas.

Les mando mis bendiciones, con el deseo de que tengan paz y armonía.

Y que Dios guarde a Panamá de su presente atolondrado.

4 comentarios:

  1. Eduardo: si el camino que recorres es el de tus sueños, comprométete con él. No dejes abierta la puerta de salida, con la excusa de que “esto se acerca, pero no es lo que busco”. Esta frase tan utilizada guarda dentro de sí la simiente de la derrota.
    Besos y bendiciones para ti. JG

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  2. Hermano:

    Sé de primera mano lo que es el silencio. Lo he vivido desde siempre por familiares cercano que lo han practicado desde que yo era muy joven.
    Respeto, entiendo y acepto (con cierta nostalgia, pues extraño nuestras tertulias) tu necesidad de mirar hacia adentro sin ser interrumpido.
    Aquí estaré cuando estés listo.
    Gabriela

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  3. Ayer alguien me preguntó qué es estar en silencio. Entonces respondí lo único que me salió en el momento "estar en silencio es escribirse poemas a uno mismo cuando estamos solos, luego leernos el poema en voz baja, convercernos que realmente no hay tal silencio, no hay tal soledad, aunque lo estemos". No sé, esto es sólo para decirte que no estás solo.
    Gloria

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  4. Como bien lo dices, callar no es lo mismo siempre que estar en silencio, silencio cuando el alma mira al futuro aprendiendo del ayer...pensando en amar cada dia mas a esos seres que Dios puso en nuestras manos, niños primero, adolecentes ahora, para hacer de ellos panameños de bien, que piensen en hacer crecer nuestro pais, como tu nos has dado muestras y enseñanzas...
    Abrazos mi primo...
    Saludos
    Francisco Cano

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